Fin de las actividades del programa Coach+ de la Gasol Foundation en el terreno de juego con los niños y niñas.

El mes de marzo finaliza y con él las actividades de la Guía Coach+ de la Gasol Foundation para nuestros jugadores y jugadoras.

Como ya habíamos comentado en otro post estas actividades tienen el propósito primordial de promover hábitos saludables en futbolistas, niños y niñas, de entre 8 y 16 años, que incluyen alimentación, actividad física y ejercicio, duración y calidad del sueño y bienestar emocional.

Como nos enseñaron desde la Gasol Foundation; la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que la obesidad infantil es una epidemia del siglo XXI y que es causada por un desequilibrio entre la ingesta calórica y el gasto calórico. La baja calidad nutricional y el alto aporte calórico, junto con la baja actividad física y el aumento de la actividad sedentaria, no son las únicas conductas asociadas a la obesidad infantil. El tiempo y la calidad del sueño y el equilibrio emocional son otros aspectos clave asociados con el aumento del sobrepeso en los niños.

El programa de actividades constaba de cuatro partes representadas por un planeta: el planeta de horas y calidad de sueño, el planeta de alimentación saludable, el planeta del bienestar emocional y el planeta de la actividad física y deporte. Todos juntos formaban La Galaxia Saludable y para que esta funcionase era primordial que los cuatro planetas estuvieran en equilibrio y bienestar.

Cada planeta se componía de cuatro conductas saludables que simbolizaban los satélites que orbitaban alrededor del planeta.

Gracias a la Guía Coach+ de promoción de hábitos saludables y las formaciones impartidas por los profesionales de la Gasol Foundation a nuestros entrenadores se llevaron a cabo varias tareas.

Todas las actividades programadas en estos últimos meses se desarrollaron en los primeros quince minutos del entrenamiento y en un tramo de la parte principal para algunos equipos. Cada una tenía una serie de mensajes clave reforzadores, de “intra-actividad”. Esta metodología es muy interesante a la hora de implantar en el subconsciente de los niños, niñas y adolescentes las distintas enseñanzas mientras se centran en jugar y pasárselo bien.

A continuación, explicamos algunas de las actividades que se llevaron a cabo en la Escuela:

• Piensa y actúa, come saludable: el objetivo era concienciar a los niños y niñas sobre la importancia de seguir la estructura del plato saludable mediante juegos que permitían trabajar y perfeccionar la habilidad técnica de control y pase. En el campo se colocaban multitud de cuadrados, siendo cada esquina de un color diferente. Cada color representaba un grupo de nutrientes: rojo=proteínas; amarillo=carbohidratos; azul=verduras y blanco=frutas. Los jugadores y jugadoras se colocaban por parejas. Cada pareja se ubicaba en un cuadrado, uno o una de la pareja en el centro del cuadrado y el otro o la otra fuera. El jugador y la jugadora de fuera del cuadrado diría un alimento y le daría un pase a su compañero o compañera que se encontraba en el centro del cuadrado, el o la cual tenía que controlar el pase en el cono “grupo de nutriente” al que perteneciera ese alimento. Cada vez que la relación grupo de nutriente-alimento fuera correcta, el jugador o jugadora del centro del cuadrado sumaría un punto. Una vez finalizaran un total de diez pases (alimentos), el jugador o la jugadora tenía que elaborar un plato saludable con al menos cinco alimentos que le había dicho su compañero o compañera. Posteriormente se hacía un cambio de rol y los miembros de la pareja intercambiaban las posiciones. El ganador o la ganadora sería la persona que consiguiera más puntos y hubiera creado un plato saludable correcto. “La mejor bebida es el agua” y “la mitad del plato deben ser frutas y verduras, así se asegura el aporte de nutrientes” fueron algunos de los mensajes claves.
• Robando y sumando emociones: aquí el objetivo era concienciar a los niños, niñas y adolescentes sobre la importancia que tienen la familia y las amistades como medio para sentirse bien emocionalmente, mediante juegos que permitían trabajar y perfeccionar la habilidad técnica de regate o dribling. Había que robar el mayor número de emociones sin que robaran las tuyas. Cada jugador o jugadora tenía un balón y un peto que se colocaba sujeto por el pantalón a modo de “cola”. Cuando el entrenador o la entrenadora decía “ya”, los jugadores y las jugadoras tenían un tiempo de dos minutos para intentar conseguir el mayor número de colas “emociones” sin que perdieran su propio balón y su propia emoción “cola”. Una vez finalizado el tiempo, el jugador y la jugadora que hubiera conseguido tener más emociones y siguiera con su balón se proclamaba el ganador o la ganadora. Mensaje clave: las emociones afectan al sueño, a las ganas de jugar y a las preferencias a la hora de comer, por eso compartirlas con los demás ayuda a sentirse mejor por lo que se dispone de más energía y permite estar más activo, dormir mejor y comer más saludable.

Estamos orgullosos por el esfuerzo y actitud que nuestros niños y niñas han puesto en cada actividad y el gran trabajo desarrollado por los cuerpos técnicos de cada equipo, por su apertura al aprendizaje y a la creatividad. La verdad es que han disfrutado mucho de este “mini recreo” en sus entrenamientos. Desde la Escuela de Fútbol Denis Suárez solo podemos dar las gracias a la Gasol Foundation por este magnífico programa y a Gadisa por seguir colaborando con nosotros.